10 Matrimonios con síndrome de Down

Alicia LlanasInformación

Cuando Elías nació, uno de los primero pensamientos que se me vinieron a la cabeza era que no se enamoraría y no podría casarse ¿también lo pensaste? Conocer historias de matrimonios con síndrome de Down, me han hecho ver lo equivocada que estaba.

Hoy en el día de San Valentin, te voy a compartir varias parejas que a lo largo de los años han demostrado que el síndrome de Down no es impedimento para encontrar al amor de su vida

Tommy y Maryanne

Ellos fue la primer pareja en casarse en el Reino Unido hace 24 años.

Se conocieron en un entrenamiento para la vida diaria, y fue amor a primera vista. Linda la mamá de Maryanne dice “todos merecen casarse con el amor de su vida”, al inicio vivieron con ella, después en su propia casa.

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pareja con síndrome de Down en Reino Unido

foto de Steve Bainbridge

Paul y Kris

Era la pareja más longeva con síndrome de Down en Estados Unidos, lamentablemente Paul falleció el año pasado, después de sufrir de demencia y del deterioro rápido a la edad de 56 años.

Cuando Kris vio a Paul, dice que vio su futuro, muchos creyeron que no debían casarse, pues no tenían la madurez, pero demostraron todo lo contrario después de 25 años de matrimonio.

Matrimonio con síndrome de Down

Buffalo News

Kieran y Emmie

Se conocieron en un campamento y se enamoraron, antes de casarse vivieron juntos, como sugerencia de la familia para ver si era lo que realmente querían y esperaban, dice la mamá “que no se mataron, así que continuaron con los planes de la boda”, la cual se llevó a cabo el pasado mes de agosto

Lydia y Tom

Lydia tiene síndrome de Down, Tom discapacidad intelectual y tiene convulsiones.

Encontré este artículo en NADS, donde la mamá de Lydia donde cuenta que más allá de la historia de amor, también hay que ser realistas sobre las necesidades, y del apoyo que se les dan, por ejemplo viven con los papás de Tom, y ellos proveen el dinero para que estos se trasladen, ya que ni Lyria, ni Toma manejan. Tanto los papás de Lydia como de Tom les ayudan con manejo de dinero, consultas de doctores, planificación de vacaciones etc

Jillian and Ryan

Se conocieron en un equipo de fútbol cuando tenían 15 años, Ryan la invitó a un baile de la escuela y ahí empezó su noviazgo, el cual duró 10 años. Un día Ryan invitó al papá de Jillian a tomar una cerveza y le dijo “quiero casarme con su hija, me da permiso?” y el papá de Jillian le contestó que si lo podía pensar, aunque realmente no tenía nada que pensar.

Viven completamente independientes, pagan la renta, tiene un perro, y no tienen ayuda ni asistencia de ningún tipo

Chloe y Jason

Ella tiene síndrome de Down, el autismo y desorden obsesivo compulsivo. El le organizo una búsqueda de tesoros en la ciudad, con la ayuda de familia y amigos le fueron dando las pistas hasta llegar a la última, donde el papá de Chloe le da la bendición, y suben al techo de un edificio donde Jason le propone matrimonio

Viven en su propia casa, independientes, salvo que necesitan ayuda con las cuentas (quién no? ) y quisieran algún día tener un hijo.

Vídeo de la boda 

Fabiola y Jose Luis

Se casaron en Nayarit México en el 2017

https://www.facebook.com/enteratenay/videos/2061847270712133/

Arturo y Blanca

Se casaron en un pequeño pueblo de Guerrero

Francisco y María

Primer matrimonio en México de un hombre con síndrome de Down y una mujer sin discapacidad.

El es terapeuta de niños con síndrome de Down.

Los padres de Sadder Isaa

Mientras la pareja anterior rompió tabús en México y hace dudar a muchos, hace un año se dio a conocer la historia de Sadder Isaa, un joven Sirio estudiante de Odontología, que cuenta que su papá tiene síndrome de Down y vive feliz en matrimonio con su esposa quien no tiene SD


Estas son tan sólo algunas historias de amor y matrimonios, existen más y hay otras tantas cocinándose ahora mismo 😉

Ahora me avergüenzo de haber pensado que mi hijo no se enamoraría, ni se podría casar, ahora sé que tanto Elías como Eva podrían hacerlo, si así lo desean,  aquí estaremos para apoyarlos en lo que sea necesario, así como nuestros padres lo hicieron.