Mi esposo y yo somos Ing en Sistemas, de hecho cuando estábamos estudiando fue cuando supimos que íbamos a ser papás. Pase mis últimas materias de la universidad embarazada, y bromeábamos que Elías iba a ser muy inteligente pues estaba recibiendo mucha información desde mi vientre, incluso el día que me gradué tenía 8 meses de embarazo, y Elías hasta parecía que sabía lo que sucedía pues se movió muchísimo durante el evento.
Oh sorpresa cuando nació… “tiene síndrome de Down” fueron las palabras que derrumbaron muchos sueños y anhelos que cualquier madre tiene para su hijo, entre ellos: jamás será ing. en Sistemas!
Creo que algo en lo que coincidimos muchos padres es que al escuchar que tu hijo tiene una discapacidad uno cree que no podrán hacer muchas de las cosas que hacemos nosotros, no hablo de cosas como ir a la universidad, o de casarse, sino de cosas tan simples como: caminar, ir al baño, comer sólo, o compartir algún pasatiempo con tu familia. Que equivocados estábamos!
No digo que será ing. en sistemas! porque probablemente el no quiera serlo! simplemente por que el no tiene porque seguir nuestros paso, así como yo no seguí los de mis padres.
Este mes de octubre, estaré participando de nuevo en el reto 31 for 21, escribir los 31 días del mes por el síndrome de Down (trisomia 21) compartiendo imágenes vía facebook y escritos via blog, el tema sera ENSÉÑAME porque las personas con síndrome de Down pueden hacer tanto como uno les enseñe y les de la libertad para hacerlo.
Se necesita tiempo, dedicación, paciencia, voluntad y definitivamente corazón.