Estas semanas he estado un poco desconectada de todo intencionalmente , pero seguimos vivos y estamos bien.

He seguido llevando a los niños a la natación, a Elías a sus clases de lenguaje, a Eva con la psicóloga, y fuera de ahí, lo demás la hemos pasado en casa viendo tele, en algún parque, de paseo, de compras, en el cine , comiendo en algún lado, visitando a algún familiar, o viendo a Sofía para sus clases de lectura/matemáticas.

Fueron unas vacaciones realmente tranquilas. Intencionalmente NO HICE NADA, y quizás me arrepienta de no haber hecho nada en los próximos días, pero me siento descansada, relajada, y lista para iniciar el nuevo ciclo escolar.

Hoy iniciaron oficialmente el ciclo 2014-2015, Elías en cuarto y Eva en segundo

No se como pasa esto tan rápido, y como cada ciclo escolar, estoy que muero de pánico. Ok no muero, pero si estoy preocupada y nerviosa, porque el plan original era que este ciclo escolar los niños iban a tener las mismas maestras que tuvieron el ciclo pasado, pero hubo cambios, y no iba a poder ser así, entonces son maestras nuevas, y eso siempre es mortificante, porque hay que empezar de cero, por un lado Elías me preocupa porque la carga de materias es mayor, por el otro lado Eva y su conducta.

Peor respiro hondo y profundo… y recuerdo que todo estará bien ¿qué es lo peor que puede pasar?

Últimamente Elías ha crecido mucho, su vocabulario esta siendo un poco más claro y cada vez le da por leer más de lo que ve en la calle, y eso siempre es emocionante. La natación ha sido todo un reto, el dice “no me gusta”, pero ahí esta adentro, llega con toda la actitud, y luego grita y llora por casi una hora, pero ahí sigue, cosa que le admiro un montón.

Eva por otro lado es una sirena rebelde, ella jura que puede nadar sola, y luego como a los dos segundos se da cuenta que no es así y busca de donde agarrarse, luego de rato vuelve a a intentarlo, ya ha sido rescatada una vez, y bueno se ha ganado a los maestros con su carácter y carisma.

Tomamos la decisión de empezar a llevarla con una psicóloga, la cual nos dice que tiene todas las bases sólo le falta algo de maduración y lenguaje, es como una niña explorando todo, y  la psicóloga está muy optimista, lo cual me da cierto optimismo a mi también.

Por mi parte estoy tratando de re-encontrarme, he vuelto a leer, a hacer ejercicio, y tratando de definir que es lo que quiero hacer con mi vida, si a mis 30 años sigo tratando de encontrar cual es mi propósito y ahora lo sé, pero ya les contaré más adelante lo que pienso hacer cuando todo vaya tomando un poco más de forma

En fin, estamos de vuelta, y es un gusto 🙂 gracias por sus mensajes, correos y llamadas el cariño es mutuo!