Hace unas semanas, una amiga me dijo que le había platicado de nosotros a una mamá de un joven de 14 años con síndrome de Down, y que la mamá quería aprender a enseñarle a leer, yo le dije que claro que no tenía problema, nos pusimos de acuerdo para vernos, y después de un rato de platicar, me preguntó que si no podía hacerlo yo, y fue uno de esos momentos que marcan tu vida, o al menos así lo sentí, y en mi estaba decir SI o NO, excusas sobraban, todas me dieron vuelta por la cabeza, al final yo no los conocía, así que no tenía ninguna presión, les decía que NO y jamás la volvía a ver, pero muy dentro de mi quería hacerlo, quería intentarlo, así que le dije que SI, ese día regrese a mi casa sintiendo una gran felicidad, emoción y nervios.
“Alicia!! tiene 14 años!! no sabe leer, reconoce algunas letras, tu no eres maestra! ¿cómo le vas a hacer?”
Pensé en mantenerlo en secreto, hasta que estuviera viniendo, hasta que viéramos algún avance, pero decidí compartirlo.
Y de rato me llego un mensaje
Y no conteste de inmediato, me pare de la silla, empece a caminar dentro de la casa y a pensarlo, viendo todos los pros y contras, pero en realidad no eran contras, eran pretextos, así que le dije que SI, después de eso me han escrito más interesados, así que estoy segura que la oportunidad que me esta dando Dios con Manolo y con Sofi es el inicio de una nueva etapa para mi, para poder compartir y ser bendición para otros de lo que he aprendido en estos años, así como obtener un ingreso.
Ayer fue la segunda clase de Sofía, y la primera clase con Manolo (el joven de 14 años), lamentablemente no tengo el permiso para compartir vídeos de Manolo, pero espero irles contando como me va con él, así como con Sofí.
Voy a dar asesorías online también, si quieren más información mandeme un correo alicia.llanas@gmail.com