Eva cursa el tercero de pre-escolar, integrada en una escuela pública en México. En su salón hay 32 niños, y una maestra, la maestra de grupo fue la maestra de Elías también y la adoramos, es una maestra genial y sabemos que esta haciendo lo más que puede con Eva

Durante este medio ciclo escolar hemos trabajado buscando las siguientes conductas adaptativas dentro de la escuela
– Que se mantenga sentada
– Que vaya al baño sóla
– Que obedezca ordenes que da la maestra
– Que comparta con sus compañeros
– Que respete la comida/cosas de los compañeros
– Que sea amable con sus compañeros
– Que no salga del salón sin permiso
– Que permanezca en su lugar durante los ejercicios de activación y en asambleas

Ha sido difícil con ella, pues aunque tiene las habilidades para poder hacerlo ella siempre termina escogiendo lo incorrecto, para ella le es muy difícil autocontrolarse y seguir ordenes, se resiste a la autoridad de un adulto, le encanta correr y que corran detrás de ella pues sabe que no la van a alcanzar.

Pero que quede claro, esto NO es propio del síndrome Down, estos problemas de conducta no son específicios de los niños con síndrome de Down, y como me dijo la maestra de Eva, así como batalla con Eva, batalla con otro par de niños igual

Cuando hablaba con la licenciada del CEIA (la escuela con la que llevamos el programa de monitoreo desde Agosto) le decía que me daba cierto pendiente de que ella jamás fuera a cambiar, a lo cual ella me dijo que eran cosas conductuales, y lo conductual se puede ‘reprogramar’, así que en eso hemos estado

Avisarle de cambio de actividades

A Eva hay que avisarle lo que sigue, antes de que se cambie de actividad, por ejemplo cuando vamos al parque le digo que vamos a ir un rato porque luego hay que ir a cenar, o a bañarse, y unos minutos antes le tengo que decir que ya nos vamos a ir, y antes de decirle cualquier cosa me acerco a ella y le digo ya es hora, a veces me dice que no, pero le pregunto ¿Qué fue lo que dijimos que hay que hacer? y ella me contesta y obedece

Recordarle lo que tiene que hacer

Eva sabe lo que tiene que hacer, pero no siempre decide hacerlo, por ejemplo en la escuela cuando estan en el patio jugando, y toca el timbre ella debe de irse a su salón, cosa que no siempre hace, pues quiere quedarse en el patio, una de las cosas que hacemos es estarle diciendo “Cuando toque el timbre te vas a ir al salón”, y la maestra trata de estar al pendiente de estar cerca de Eva cuando suena el timbre para poder evitar la conducta inadecuada (de correr lejos) y reforzar la conducta adecuada (encaminarla al salón)

Cuando va al baño igual, ella sabe lo que tiene que hacer, pero lo más divertido es estar en el espejo viendose (como buena mujer), así que hay que estar cerca de ella recordandole lo que tiene que hacer

Tiempos fuera parcial y completo

En la escuela se divide como en dos tiempos la mañana, si Eva se portaba mal la primera parte de la mañana le estaban quitando 10 minutos de recreo, lo cual no estaba funcionando porque al final ella seguia saliendo al recreo aunque fueran 10 minutos, y además si en la salida la maestra me decía que Eva se había portado bien (la segunda mitad de la mañana) yo la llevaba a los juegos en lo que hacíamos tiempo para que Elías saliera de la escuela, así que ella seguía teniendo su recompensa: los juegos

Así que nos recomendaron usar tiempo fuera total, si se le iba a castigar el recreo tenía que ser todo el recreo, o si iba a hacer el lonche es no darle el lonche

Durante la primera parte de la mañana, si ella estaba pintando, y le rayaba el dibujo a su compañero o le quitaba algo, la recomendación era el tiempo fuera parcial, que es jalar la silla hacia atrás y que por un pequeño momento ella se quede sin la actividad para que vea cuales son las conductas apropiadas, en este caso, pintar su trabajo respetando el trabajo del compañero,  y no regresa hasta que ella indique que quiere volver a la actividad (cosa que pasa casi inmediatamente)

Si Eva seguía sin atender indicaciones, se le quita por completo la actividad que sigue que es el lonche, y/o  el recreo.

Calendario del buen comportamiento

Confieso que aun no lo hacemos, pero consiste en poner en una hoja las actividades que deseamos que ella haga y ponerle alguna carita feliz, sticker o algo donde llevemos el control, y poder darle o no el reforzamiento

Ahora Eva te dice que “no” o “no quiero” a todo, así que tienen que decirle que sino lo hace no va a tener locnhe, o no va a tener recreo

Si la primera parte de la mañana se porto bien, su reforzamiento es el lonche y recreo

Si la segunda parte de la mañana se portó bien, su reforzamiento en casa es jugar al kinect en la noche

El problema que yo veo con Eva es que no le importan los premios o la falta de ellos, si los tiene que bueno y sino también, pero creemos que con el tiempo ella puede entender que le puede “doler” la falta de su reforzamiento y estimularla a comportarse de manera adecuada

Relación cordial con sus compañeros

A ella le cuesta compartir, pedir prestado, medir su fuerza, impulsividad, emoción

Así que hay que marcarle tiempo del uso de algún juguete, recordarle que DEBE compartir, y que si ella presta algo se lo van a regresar, son conductas yo creo aprendidas y adquiridas por la casa hogar, y por el ambiente donde todo era de todos, y donde el que era más fuerte obtenía lo que quería, porque VAYA que es fuerte, no le puedes quitar algo de la mano, NADIE ni siquiera un adulto

Esto es del área condctual, pero también hay otras cosas que estamos haciendo para ayudarla a tener un mejor rendimiento, pero esos requieren su propio post 🙂